31 diciembre 2004

PARTIDA DE AJEDREZ

Él continúa con su estrategia. Esta vez no entendemos el movimiento que ha realizado. La ficha elegida y la dirección tomada no coinciden, en absoluto, con nuestras expectativas. Ha hecho retroceder a un peón pudiendo servirse del alfil real o incluso de la reina para acercarse más al jaque final. Sin embargo, sabemos de antemano que Él va a ganar la partida; de hecho, tiene ya la victoria en sus manos, sólo nos queda ver -aceptar y apoyar- cómo acomente ese triunfo. Y ahora toca elegir si en el 2005 vamos a ser fichas que faciliten o que entorpezcan el movimiento hacia el triunfo.